Tu vida es muy valiosa y tu existencia también lo es, por ello, es importante que sepas darte valor a ti mismo, frente a personas que no te toman en serio. Gente que te dice que te llamará cuando luego, en realidad, no lo hace. Personas que te prometen algo que no cumplen. Gente que rompe tus expectativas constantemente como si tú fueses una marioneta de trapo sin ningún tipo de valor.
Las relaciones sociales deben sumar ilusión y bienestar a tu vida, sin embargo, no tienen que sumar preocupaciones innecesarias. Si alguien no te da aquello que tú necesitas, entonces, aunque parezca frío y egoísta, lo que tienes que hacer es marcar distancia, pero siempre diciéndole aquello que piensas.
No te calles las cosas, y todavía más cuando ya has acumulado varias experiencias negativas con una misma persona. Dile claramente qué piensas y qué sientes. Por ejemplo, en caso de que alguien haya recurrido a la excusa de “no tengo tiempo” para justificar que no te haya llamado en meses, incluso cuando te prometió que iba a hacerlo puedes decirle: “Estoy seguro de que para otras cosas, sí has tenido tiempo”.
Cuando las personas no se portan correctamente con nosotros, es importante que lo digamos y que se lo hagamos saber para que puedan tomar conciencia de que ese no es el camino adecuado en el respeto. En cambio, si nunca le dices a una persona qué piensas, entonces, corres el riesgo de que esa persona se haga todavía más fuerte en esos gestos que son totalmente injustificables.
Es un momento de incomodidad decirle a una persona que no te gusta cómo te trata o que te resulta totalmente incoherente por su parte su actitud. Sin embargo, lo que es de verdad incómodo es soportar gestos de alguien que te promete cosas que luego no cumple. Eso te roba energía y te causa dolor en el alma.
En Conocernos, te recordamos que tú eres quien marca límites a los demás y eso tiene que hacerte sentir bien.