Las críticas parecen estar presentes en todo momento. Debido a que existen tantos pensamientos como personas sobre el planeta (sin dejar de mencionar que ningún individuo es capaz de gobernar las opiniones o consideraciones de otros), la realidad es que prácticamente nunca lograrás conformar a todas las personas que te rodean con respecto a lo que haces. Hay mucha gente que se caracteriza por ser especialmente vulnerable en relación a lo que piensen los demás. Si eres una de esas personas que se caracterizan por preocuparse demasiado por la voluntad ajena, a continuación brindaremos una serie de consejos sumamente útiles para lograr superar este tipo de emociones.
En primer lugar es recomendable que cada día te empeñes en mejorar, pero no para recibir la aprobación de la gente que te rodea, sino para obtener tu propia satisfacción personal. Es de suma importancia que te esfuerces para enriquecer tu autoestima lo más que puedas, ya que si no te valoras lo suficiente a ti mismo corres el riesgo de desmoronarte ante la crítica más leve.
Es bueno considerar que existe una clara diferencia entre tener seguridad propia y tener una actitud soberbia u orgullosa. Tampoco es recomendable ser demasiado exigente con uno mismo, por el simple hecho de que esta actitud crítica en exceso lleva a determinadas personas a dos situaciones distintas: comportarse como si nada les fuera suficiente o menospreciarse hasta llegar a los extremos de la depresión.
Entre algunas de las razones principales por las cuales hombres y mujeres suelen ser tan susceptibles a las críticas podemos mencionar las siguientes: el miedo inconsciente de ser rechazados por el grupo, la necesidad de agradar a los demás, la creencia de que son más importantes los halagos que las reprobaciones, el temor de que descubran nuestros defectos o el miedo de perjudicar nuestra imagen, entre otras.
Si te sentiste identificado/a con uno o varios de los motivos mencionados anteriormente, seguramente necesitas algunas sugerencias para hacer frente al habitual temor del «qué dirán». He aquí un listado que las recopila, el cual te será sumamente útil:
- Las críticas, en su mayoría, son proyecciones. Esto quiere decir que dependen más de la persona que las emite que de la persona que las recibe. No son pocas las ocasiones en las que las quejas o reproches reflejan las propias necesidades y temores de quienes las dicen.
- Las críticas que pueden llegar a sumar en tu vida son las que provienen de personas que ya han conseguido éxito en aquello que tú te propones. Existe demasiada hipocresía en la gente, ya que hablar es muy sencillo pero al momento de actuar no todos son capaces. Por ejemplo: de nada sirve la apreciación sobre relaciones humanas de un individuo que no puede mantener una relación más de unos pocos meses.
- Tal como mencionamos al principio, resulta imposible estar de acuerdo con las opiniones de todo el mundo. Por esta razón es aconsejable aprender a vivir con la crítica. La mejor forma de hacerlo es aceptarla como algo normal, tomarla si realmente es razonable y desecharla si verdaderamente no tiene sentido alguno.