Aceptar el paso del tiempo es una obligación emocional ya que quien no asume la ley del tiempo sufre mucho más ante la inevitable inercia de los días, meses y años. Existen personas que no aceptan su edad.
Así sucede en el caso de aquellas personas de 40 años que se comportan como cuando tenían 20. O también, en el caso de esas personas que visten de una forma adolescente.
¿Cómo aceptar el paso del tiempo y todavía más, conforme el reloj biológico avanza?
1. En primer lugar, piensa que cada etapa tiene algo bueno. No es una buena idea mitificar al extremo la juventud ya que cada momento tiene un encanto bonito. Las personas jóvenes tienen por delante todo el futuro, pero las personas que ya han cumplido los 65 tienen la satisfacción de poder descansar y jubilarse.
2. Da las gracias a la vida por estar vivo. La ley del paso del tiempo es más positiva que la opción contraria: la muerte. Disfruta de ese tic-tac tan particular del reloj porque mientras tanto, puedes saborear nuevas vivencias, experiencias y emociones.
3. No utilices el concepto vejez. Piensa que las personas de ochenta años son mayores pero no viejas. Envejecen los trastos y los libros pero no las personas que tienen el corazón lleno de ilusiones y de sueños.
4. No conviertas la edad en un factor determinante en tu vida. Tener cuarenta años no significa no tener relación con personas jóvenes o mayores. De hecho, el diálogo intergeneracional enriquece a todos.
5. Mírate al espejo con la satisfacción de estar bien y tener salud ya que ese es el verdadero sentido de la belleza. Existe mucha belleza en una persona mayor de pelo canosos, rostro arrugado y mirada serena. Esconde la belleza de la vida, las experiencias de un largo camino recorrido.
El paso del tiempo es una suma constante, por tanto, piensa que estás en un proceso de evolucion a través del cual, creces como persona y te transformas por dentro al cien por cien.
El tiempo pasa aunque no quieras así que no te resistas.